Un llamado al pueblo mexicano desde el corazón de la Patria
Me comprometo y le digo al pueblo de México en esta plaza maravillosa, corazón de la patria, que protesto ante ustedes no mentir, no robar y nunca traicionar al pueblo de México ni la dignidad de la República.
En medio de la emblemática plaza que representa el corazón de nuestra nación, me dirijo al pueblo de México con un compromiso solemne y una promesa irrevocable. En este espacio sagrado, donde resonaron los ecos de nuestra historia y se forjaron los lazos que nos unen como sociedad, levanto mi voz para afirmar que mi deber es servir con honestidad y respeto, velando por la dignidad de nuestra amada República.
Desde esta plataforma, declaro ante ustedes que mi protesta es clara y firme: no mentiré, no robaré y nunca traicionaré la confianza depositada en mí por el pueblo de México. Esta no es una mera declaración política, sino un compromiso moral que asumo con convicción y responsabilidad.
La honestidad es el cimiento sobre el cual debe erigirse cualquier gestión pública. Es el deber fundamental de todo servidor del Estado rendir cuentas y actuar con transparencia en el ejercicio de sus funciones. La confianza del pueblo mexicano es un tesoro invaluable que no puede ser vulnerado por intereses personales o políticos.
Al mismo tiempo, la dignidad de la República es un principio que debe ser preservado en todo momento. Nuestro país merece ser representado con decoro y respeto en el escenario nacional e internacional. No toleraré acciones que menoscaben la integridad de nuestra nación ni comprometan su soberanía.
Este compromiso no es solo con el presente, sino también con las generaciones futuras. Debemos sentar las bases para un México donde la honestidad y la dignidad sean los pilares sobre los cuales se construya el progreso y la justicia social.
En este sentido, convoco a todos los ciudadanos a unirse a esta causa común. Juntos, podemos impulsar un cambio real y duradero en nuestra sociedad, donde la ética y la moral sean los valores que guíen nuestras acciones.
En esta plaza maravillosa, en el corazón de la patria, reafirmo mi compromiso de trabajar incansablemente por un México más justo, transparente y digno. Que este mensaje resuene en cada rincón de nuestra nación y nos inspire a construir un futuro mejor para todos.