Primer festival de Trova en Bacalar
Descubre la magia de la trova en el emblemático Fuerte de San Felipe durante dos días de melodías y cultura en Quintana Roo.
En el corazón de Quintana Roo, la tranquila y pintoresca ciudad de Bacalar se convirtió en el epicentro de la música y la cultura este pasado fin de semana, al dar la bienvenida al Primer Festival de Trova. Este evento, que tuvo lugar en el emblemático Fuerte de San Felipe, se erigió como un homenaje a la rica tradición musical de la región y como una celebración de la identidad cultural quintanarroense.
Durante dos días consecutivos, familias locales, así como visitantes nacionales y extranjeros, se congregaron en este enclave histórico para sumergirse en las melodías cautivadoras y la atmósfera vibrante que caracterizan a la trova. Con el telón de fondo de las imponentes murallas del fuerte y la brisa fresca del Caribe, los asistentes disfrutaron de un repertorio diverso de artistas locales e invitados especiales, que compartieron sus historias y emociones a través de la música.
El festival no solo fue una oportunidad para deleitarse con la trova en su máxima expresión, sino también para explorar la riqueza cultural de Quintana Roo. Los visitantes tuvieron la oportunidad de sumergirse en la historia de Bacalar mientras paseaban por las calles adoquinadas del pueblo, exploraban sus encantadoras plazas y se maravillaban con la belleza serena de la Laguna de los Siete Colores.
Además de los conciertos principales en el Fuerte de San Felipe, el festival ofreció una variedad de actividades complementarias, incluyendo talleres de música, exposiciones artísticas y gastronomía local. Los asistentes tuvieron la oportunidad de interactuar con los artistas, aprender sobre la artesanía local y disfrutar de la deliciosa cocina tradicional de la región.
El Primer Festival de Trova en Bacalar no solo fue un evento musical, sino también una celebración de la comunidad y la diversidad cultural de Quintana Roo. En un momento en el que la música en vivo y los encuentros sociales han sido limitados, este festival sirvió como un recordatorio de la importancia de la cultura como un puente que une a las personas y enriquece nuestras vidas.
Así, mientras el sol se ponía sobre la Laguna de Bacalar y las últimas notas de trova resonaban en el aire, los asistentes se despidieron con el corazón lleno de música, recuerdos y el deseo de volver a vivir la magia del Pueblo Mágico en futuras ediciones de este evento tan especial.